1. Muchas veces actuamos como niños caprichosos.
2. Pedimos a Dios, pero anclados a una actitud egoísta.
3. El egoísmo bloquea los canales de Bendición.
4. El secreto está en pedir para dar.
5. Hay mayor alegría cuando se da que cuando se recibe.
6. El alma vino a este mundo a refinarse.
7. En el momento que damos estamos emulando a Nuestro Hacedor.
8. El alma desea adquirir méritos en este mundo, y sólo puede lograrse a través del amor altruista.
Shalom U’Brajot (Paz y Bendiciones)